Luego de haberse quedado sin el título de Turismo Carretera a raíz del toque recibido por Mariano Werner, el piloto de Chevrolet dialogó en extenso con Campeones. Reflexivo, triste y con la bronca lógica apuntó al entrerriano. "Mariano tuvo el objetivo de sacarme de pista y lo logró", afirmó Rossi.
Domingo 4 de diciembre a las 17 horas. La elevada temperatura todavía reinaba en el autódromo “Roberto Mouras” de La Plata y más en los boxes, donde gran parte del público aún no entendía lo que había sucedido. Algo similar sintió internamente Matías Rossi, quien a pocos metros de culminar la carrera recibió un golpe de Mariano Werner, su principal rival en la lucha por el título.
Casi 3 horas más tardes de ese momento, el piloto de Chevrolet aceptó el mano a mano con Campeones, donde de manera reflexiva detalló lo sucedido y se descargó por la actitud del entrerriano.
“Siento tristeza por mi equipo y por todo el grupo. Uno siempre viene con mucha ilusión y faltando tan poco que pase eso me da mucha tristeza. Werner no tenía ninguna posibilidad de pasarme, se tiró a golpearme con las 4 ruedas en el pasto y lo logró”, sostuvo Rossi.
“Cuando vamos a doblar a la derecha voy a la cuerda y no hay espacio. Cuando lo veo me abro, pero igual me pega, ahí se me escapó el auto de las manos”, detalló sobre lo que sintió arriba de su auto al momento del toque.
A partir de ahí llegó la confusión, primero que había terminado 21° y con eso era campeón. Sin embargo, luego se constataron errores en el clasificador y finalmente quedó ubicado 24°, con lo que el monarca pasó a ser Guillermo Ortelli.
“Los comisarios nos avisaron que ganamos el campeonato por llegar 21, después se generó la confusión, hubo una falla en el sensor y llegué 24”, aceptó Rossi tras analizar los videos junto al comisariato deportivo.
Luego de ello, el equipo Donto decidió hacer una denuncia formal para que todos los autos que terminaron delante de Rossi sean verificados por la técnica, algo que no prosperó. “Ante ese desenlace se decidió hacer la denuncia en técnica, porque si había autos fuera de reglamento nos podría favorecer. Los Comisarios lo aceptaron, pero la parte técnica dijo que no porque estaba fuera de tiempo”.
Dolido y sin encontrar demasiadas explicaciones, Rossi apuntó otra vez a la actitud de Werner. “Fue un choque con intención y no debe pasarse por alto. Debe ser visto, tuvo un objetivo que fue sacarme de la pista, esto no puede pasar por alto. No fue un error, si ponés las 4 ruedas en el pasto y te tirás como un animal no se puede aceptar una disculpa”.
Siempre analítico, Rossi repitió un dicho que hoy volvió a mostrar su gran vigencia a pesar de que el tiempo pase. “Un gran maestro dijo que las carreras se terminan con la bandera y siempre lo tengo presente. En lo personal queda la tranquilidad que dejé todo, en cambio Werner no fue limpio, jugó sucio”.
Sobre su futuro en el Turismo Carretera se animó a decir que “ahora quiero descansar, pero antes de Navidad tendré todo resuelto”.
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